Grupo Calidra inauguró su planta de ósmosis inversa, un salto productivo, comercial y sostenible
La flamante planta de tratamiento de agua en San Juan marca un hito en la estrategia integral de la calera. Con un impacto directo en la calidad del carbonato de calcio precipitado, refuerza su liderazgo en soluciones para la industria de pinturas.
En línea con su compromiso con la calidad, la innovación y el desarrollo sostenible, Grupo Calidra dio un nuevo paso estratégico en su operación argentina. Inauguramos en la planta de La Laja, en San Juan, una moderna planta de tratamiento de agua por ósmosis inversa. El objetivo: mejorar sustancialmente el proceso de elaboración del carbonato de calcio precipitado, un insumo esencial para la fabricación de pinturas de alta performance.
Este hito forma parte de una estrategia macro que abarca tres dimensiones clave para nuestro negocio: la optimización productiva, el fortalecimiento comercial y el compromiso ambiental. A su vez, se integra a un plan de infraestructura que incluye un acueducto recientemente finalizado y otros proyectos y mejoras edilicias en la planta.
“Este proyecto tiene más de una década de desarrollo”, explica Leonardo Médici, Gerente de Planta y Operaciones de Carbonato de Calcio de Grupo Calidra Argentina. “Nace de un trabajo conjunto con nuestros principales clientes del sector de la pintura. Ellos detectaron oportunidades de mejora en sus pinturas y, tras años de investigación conjunta, identificamos que el origen estaba en el alto contenido de sales disueltas en agua de proceso”, agrega.
El carbonato de calcio precipitado o CCP –que en su proceso utiliza cal viva (CaO) para obtener una pulpa de hidróxido de calcio (Ca(OH)2), la cual se carbonata mediante la adición de CO2 proveniente de los hornos caleros– requiere agua de calidad controlada para lograr un comportamiento químicamente estable.
La nueva planta de ósmosis inversa permite reducir drásticamente las sales disueltas, entregando agua con apenas 40 µS/cm de conductividad, un agua más blanda, con menos minerales. Este cambio impacta directamente en la calidad del carbonato de calcio precipitado.
Ventaja comercial: calidad + eficiencia + futuro
La puesta en marcha de esta planta no sólo consolida un diferencial de calidad frente a nuestros competidores, sino que eleva sustancialmente la propuesta de valor al cliente. La reducción del uso de aditivos importados, difíciles de conseguir y cotizados en dólares, se traduce en ahorros económicos para la industria de pinturas.
“El nuevo proceso aporta estabilidad al producto y simplifica las formulaciones de nuestros clientes, produciendo lotes más homogéneos y con menor sedimentación”, agrega Médici. “Al eliminar las sales disueltas en el agua, los químicos interactúan directamente con el carbonato, generando una dispersión más estable y un equilibrio químico perfecto”.
Ya se realizaron pruebas industriales con los principales clientes, y los resultados obtenidos en las pruebas piloto fueron validados con éxito. Ahora nos encontramos en un proceso de homologación definitiva con vistas a escalar el uso de agua tratada en toda nuestra producción de carbonato de calcio precipitado.
Esto es sólo el primer paso de una expansión que podría incluir la incursión de la compañía en otras industrias como la farmacéutica, química y alimenticia, ya que el CCP es indispensable para la producción de, por ejemplo, pastillas antiácido y dentífricos.
“Los análisis químicos que exige la industria farmacéutica para ese carbonato son muy altos: tiene que ser muy bajo el contenido de sales disueltas. Nosotros entramos dentro de una primera especificación. Está claro que para llegar a un producto que sea apto medicinal tenemos que cumplir muchas cosas más, pero ya nuestra primera etapa del proceso estaría cumplida”, asegura Leonardo Médici.
Sustentabilidad: eficiencia hídrica y menor huella ambiental
El proyecto tiene un impacto ambiental significativo. La nueva planta de tratamiento se complementa con un acueducto de 15 kilómetros que conecta directamente los pozos de agua con la planta industrial, eliminando la necesidad de transporte mediante camiones cisterna. Esto optimiza el uso de recursos, y a la vez, reduce emisiones y circulación de vehículos pesados en la zona.
“El acueducto nos permite contar con un suministro constante y automatizado de agua tratada, mejorando toda la operación”, destaca Leonardo Medicci líder del proyecto.
El 16% del agua que es de rechazo del proceso de ósmosis, también llamada ‘agua salada’, será reutilizada para riego de caminos internos, ayudando a mitigar la emisión de polvo en la planta, cerrando así un ciclo eficiente de gestión del recurso.
“Antes de la finalización el acueducto utilizábamos siete camiones regadores para traer el agua desde el del mismo. Ahora con el acueducto finalizado y puesto en marcha, reducimos a tres camiones que hacen el trabajo de riego de caminos con el para contención de polvo, lo cual se traduce en ahorro”, detalla Medicci.
Asimismo, el proyecto impacta en la comunidad de Albardón. El pozo de suministro de agua está en el predio de la planta donde acabamos de inaugurar un vivero de especies nativas. “Ese vivero también se alimenta del pozo que alimenta al acueducto. Entonces, de alguna manera, también estamos contribuyendo con el medio ambiente, alimentando a estas especies nativas que después van a ser donadas a la comunidad”, Sostiene Medicci.
Por otro lado, el uso de agua con baja conductividad contribuye a prolongar la vida útil de nuestras instalaciones. “Evitar incrustaciones en los sistemas es un beneficio adicional que se traduce en menor mantenimiento, menor consumo de repuestos y mayor durabilidad en las inversiones realizadas”, como asi mismo un gran impacto en al calidades de nuestros productos de carbonato de calcio precipitado. Expreso Medicci.
Un paso más en la estrategia de liderazgo de Grupo Calidra
La flamante planta de ósmosis inversa y el acueducto representan mucho más que una mejora técnica: se trata de una apuesta pensada a largo plazo, que consolida nuestra estrategia de liderazgo en el mercado de cales y carbonatos.
Desde San Juan, estamos dando respuesta a una necesidad concreta de nuestros principales clientes y al mismo tiempo afianzamos nuestro compromiso con la innovación tecnológica, el desarrollo sustentable y la excelencia operativa. Lo hacemos con una mirada sistémica, que conecta infraestructura, procesos y productos, para entregar más valor con menos impacto.




